A FUEGO LENTO
Amanece bajo la niebla junto al canto de los primeros pájaros y el olor de humeantes chimeneas, mientras todos duermen. Ella se agarra a la tierra, aprieta los pies fuerte, muy adentro renombra lo innombrable en los contornos borrosos; despierta la ausencia quietud en lo dormido, tiembla bajo el cielo blanquecino. La soledad se ha ido fraguando a fuego lento, hasta tocar raíces, hasta casi detenerse en medio del camino. Teje el frío en la huerta una mezcla de masa y dulce de leche, gotas transparentes de rocío sobre los pétalos, es el invierno sin resguardo un silencio contundente, ambigua sonrisa del amanecer.
Amanece de nuevo el cielo con su rumor de invierno, de nuevo este desasosiego entre estar y no estar. Es este bostezo toda mi salvación. ¿Aún duermo? Cuando ahondo en el duro colchón de incertezas, despertar se hace pesado. Amanece y mis pies asoman bajo las sábanas, y se me antoja soñarme libre y desnuda. ¿Hasta cuándo este andar vagabundo, esta dolorida mirada?

Nació en 1967 en Los Llanos de la Concepción (Fuerteventura). Licenciada en Filología Inglesa por la Universidad de La Laguna, donde se acercó a la poesía y al teatro. Profesora en Instituto de Educación Secundaria. Además de su interés por la palabra escrita disfruta del color y la danza como medios de expresión íntima.
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